Experiencia especial

Fue una experiencia muy especial el verano pasado. Después de que Jan seleccionara una Corokia para mí, me pidió que caminara hacia ella con los brazos abiertos. A unos dos metros de distancia, sentí una especie de "muro" y un flujo de energía recorrió todo mi cuerpo desde la región del corazón. Ahora el Corokia está en la habitación. A veces, cuando me siento cerca de ella, vuelve la sensación de "hormigueo". Como si la planta buscara el contacto. H.L.E.